El trabajo se realiza de manera simultánea en 40 países y en Argentina, solo en Jujuy y Buenos Aires. Invitan a pacientes recuperados mayores de 60 años a sumarse.

“El lunes 11 de enero comenzamos con el trabajo de investigación titulado: ´Evaluación del impacto de factores genéticos y ambientales sobre el riesgo de deterioro cognitivo inducido por la infección por SARS-CoV-2´ en una cohorte de adultos mayores de 60 años de la provincia de Jujuy ”, explicó el Secretario de Salud Mental y Adicciones, Agustín Yécora.

El estudio se desarrolla en conjunto entre el Ministerio de Salud, la Secretaría de Salud Mental  y Adicciones, el Centro Provincial de Adultos Mayores (CEPAM) y la Fundación de Lucha Contra los Trastornos Neurológicos y Psiquiátricos en Minorías (FULTRA).

“El trabajo aquí propuesto es parte de un consorcio internacional de investigación con auspicio técnico del Programa de Enfermedades Neurológicas y Neurociencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), enfocado en la fenomenología y la epidemiología de las secuelas neuropsiquiátricas crónicas de la infección por Covid-19  ”, precisó Yécora.

El proyecto evaluará las siguientes hipótesis:

 La infección por SARS-CoV2 tiene secuelas neuropsiquiátricas crónicas.

La gravedad de los síntomas respiratorios durante la fase aguda de COVID-19 está directamente relacionada con el daño al sistema nervioso central y, por lo tanto, la gravedad de la enfermedad respiratoria es una medida indirecta del riesgo de complicaciones neurológicas.

El coqueo resulta en estimulación leve del sistema nervioso central y puede reducir el riesgo de deterioro cognitivo (o reducir sus manifestaciones) en adultos mayores que han cursado una infección por SARS-CoV2.

El litio en bajas concentraciones en el agua de consumo actúa como neuroprotector y reduce el riesgo de deterioro cognitivo en adultos mayores que han cursado una infección por SARS-CoV2

La urbanización/aculturación de miembros de las comunidades andinas aumenta el riesgo de deterioro cognitivo en adultos mayores que han cursado una infección por SARS-CoV2.

El riesgo de deterioro cognitivo luego de la infección por SARS-CoV-2 es modificado según la herencia genética.

 En tanto, Yécora sostuvo que se avanzará considerando que “es posible que la enfermedad genere alguna alteración en el sistema nervioso central, que pueda ser causante de demencia, deterioro cognitivo, generación de trastorno de ansiedad, entre otras patologías”.

 

La investigación se desarrolla de manera paralela en 40 países y resulta fundamental para la detección temprana de comportamientos y de síntomas a fin de atenuar los daños que el coronavirus pueda ocasionar.

 En la Provincia de Jujuy  se prevé trabajar con un total de 1000 pacientes recuperados del virus, por lo que se convoca a quienes deseen sumarse a la experiencia sin mayor intervención que un análisis de sangre para la muestra de ADN. La investigación prevé el seguimiento a los 6, 9 y 18 meses posteriores al contagio con el análisis de la cognición y el comportamiento y se espera que los primeros resultados se difundan a principios de 2022.

 Cabe destacar que el coordinador del proyecto, Gabriel de Erausquin, profesional argentino de la Psiquiatría y la Neurología, docente en la Universidad de Texas y referente a nivel mundial visitará Jujuy en las próximas semanas.

 Los interesados podrán dirigirse a la sede del CEPAM en Alvear 1152 de la capital jujeña de lunes a viernes de 13 a 19 horas.