Las personas con diabetes deben cumplir medidas de autocuidado: llevar una nutrición saludable es parte importante del manejo de esta enfermedad,
sabiendo qué comer y cuándo hacerlo, porque cada alimento afecta de manera diferente los niveles de glucosa en sangre. Además, la realización de actividad física con regularidad es esencial para el control de la glucemia. La adherencia al tratamiento es clave para un buen manejo de la enfermedad y prevenir complicaciones a largo plazo. Particularmente, en los casos en que el tratamiento incluye la administración de insulina, la multiplicidad de inyecciones diarias, el cambio frecuente de lapicera o el dolor tras la aplicación, son factores que pueden afectar la adherencia.
La nueva presentación de insulina degludec de 200 U/ml conserva las propiedades y el perfil de seguridad de insulina degludec 100 U/ml, conteniendo una dosis concentrada en volúmenes reducidos, en una lapicera prellenada que administra hasta 160 unidades de insulina en una sola inyección.
1 de cada 3 personas con diabetes requiere una dosis elevada de insulina basal en cada aplicación. Para este grupo, una insulina concentrada como degludec 200 U/ml facilita la inyección, disminuye los reportes de dolor localizado y evita desdoblar la dosis, reduciendo el número de inyecciones.
El cuidado de los sitios de aplicación de la insulina, así como la técnica de la inyección son fundamentales para el manejo del control de la glucosa; la posibilidad de administrar la dosis de insulina necesaria en menor volumen ayudaría a preservar el tejido celular subcutáneo y evitar complicaciones relacionadas.
“La administración de elevados volúmenes de insulina puede hacer algo más dificultosa la aplicación, con riesgo de causar molestia o dolor en el sitio de inyección y requerir más fuerza o destreza. Esta insulina concentrada en menor volumen viene a mejorar específicamente este aspecto, ganando en comodidad para los pacientes, con la misma eficacia terapéutica, lo que podría inclusive contribuir a una mejor adherencia al tratamiento”, sostuvo el Dr. Félix Puchulu, jefe de la División Diabetología del Hospital de Clínicas ‘José de San Martín’.
“El tratamiento de la diabetes es cada vez más personalizado, ajustando las dosis de insulina de acuerdo con el peso, edad, necesidades y objetivos terapéuticos de cada persona, realizando modificaciones a partir del seguimiento que se hace de los resultados que se van obteniendo en el manejo de la enfermedad. En este sentido, es muy útil la llegada de nuevas insulinas que se puedan adaptar a las necesidades individuales de los pacientes”, agregó el especialista.
Cerca de 463 millones de adultos tienen diabetes en el mundo y se cree que esa cifra ascenderá a 700 millones para 2045. Según la 4a Encuesta Nacional de Factores de Riesgo del Ministerio de Salud de la Nación (realizada en 2018 y presentada en 2019), la prevalencia autorreportada de glucemia elevada/diabetes en nuestro país en mayores de 18 años alcanza al 12,7% de la población en mayores de 18 años, lo que representa aproximadamente 4.092.000 personas. Estos valores son un 29,6% mayores que los de la edición anterior de la encuesta (9,8% en 2013), lo que está en línea con el crecimiento del sobrepeso y la obesidad, uno de los principales factores que contribuyen al desarrollo de diabetes tipo 2.
La diabetes es una enfermedad que se presenta cuando el páncreas no puede producir insulina o cuando el organismo no la utiliza correctamente. La insulina es una hormona que permite que la glucosa en sangre pase a las células del cuerpo en forma de energía. Si no funciona correctamente, la glucosa se acumula en la sangre y con el tiempo puede ocasionar daños irreversibles en vasos sanguíneos, órganos y tejidos.
Las formas más comunes son la diabetes tipo 1 y la tipo 2. La primera se presenta, por lo general, en etapas tempranas de la vida (aunque puede comenzar a cualquier edad) y no se puede prevenir aún. Aquí el organismo no produce insulina, por lo que ésta hormona debe ser administrada todos los días. En cambio, la diabetes tipo 2, que es la más frecuente, en muchos casos se puede prevenir o demorar llevando una vida saludable. Afecta generalmente a adultos que presentan sobrepeso u obesidad y sedentarismo, observándose que la edad de comienzo va adelantándose, ya que existe diabetes tipo 2 en niños y adolescentes.
Acerca de degludec
Degludec es una insulina basal que se administra una vez al día y ofrece una duración de acción de más de 42 horas con un efecto estable y continuado en la disminución de la glucosa. En los ensayos clínicos, condujo a una efectiva reducción de los niveles de HbA1c y mostró un riesgo más bajo de hipoglucemia en estudios en comparación con insulina glargina U100,
También ofrece una variabilidad día a día más baja en el efecto de disminución de los niveles de glucosa frente a insulina glargina U100 e insulina glargina U300. Asimismo, la insulina degludec ha demostrado seguridad cardiovascular en pacientes con DM2 y alto riesgo cardiovascular. Degludec recibió su primera aprobación regulatoria en septiembre de 2012 y, desde entonces, ha sido aprobada en más de 80 países en todo el mundo. Ahora está disponible en más de 61 países.
La formulación de degludec 200 U/ml supone una nueva alternativa terapéutica en aquellos pacientes con diabetes que requieren dosis altas de insulina, permitiendo administrar la dosis de insulina que requieran (hasta 160 U) en una sola inyección en lugar de en múltiples inyecciones, así como en pacientes donde el dolor en el sitio de inyección o la preservación del tejido celular subcutáneo constituyan una barrera para la insulinización.