La elección de alimentos, el talento, el entrenamiento, la motivación, el estilo de vida y la ausencia de lesiones son factores que contribuyen a que la persona que hacer ejercicio despliegue todo su potencial y alcance sus objetivos. En ocasiones, todo esto se complementa con suplementos nutricionales que contribuyen a mejorar el rendimiento deportivo. Es un tema del que se habla poco, que arrastra ciertos prejuicios y desinformación, pero acaban de presentarse los resultados de un relevamiento llevado adelante por la encuestadora IPSOS a más de mil argentinos residentes del Área Metropolitana de Buenos Aires, que realizan ejercicio frecuente y, entre otros resultados, éste arrojó que 7 de cada 10 consideran que los suplementos de proteínas son buenos complementos para la actividad física.

Hasta hace poco, los suplementos de proteínas eran consumidos principalmente por atletas de competición o deportistas profesionales, pero en la actualidad esto ha cambiado y crece su uso entre personas que llevan una vida activa, cuidan su alimentación, realizan ejercicio dos, tres o cuatro veces por semana, pero con fines recreativos o de búsqueda de una vida saludable.

Entre los encuestados, por ejemplo, entre 5 y 6 de cada 10 consideraron que estos productos son para quienes realizan actividad física intensa, pero entre 3 y 4 de cada 10 sostuvieron que son para cualquiera que realice algún tipo de actividad física y 3 de cada 10 afirmaron que son para todos, para cuidar la salud en general, por lo que claramente la percepción sobre su uso y sus beneficios ha ido evolucionando en el tiempo.

“Llevar a cabo una alimentación completa, equilibrada y que logre cubrir todos los requerimientos nutricionales puede ser un verdadero desafío. Por eso, el uso de suplementos dietarios puede ser una herramienta muy útil para aquellas personas activas, que desean mejorar su rendimiento deportivo, su composición corporal, evitar lesiones y retrasar el envejecimiento”, sostuvo Cecilia Martinelli, licenciada en Nutrición, docente de la Universidad de Belgrano e integrante del Comité Científico de la Asociación Argentina de Dietistas y Nutricionistas Dietistas (AADYND).

Con robusta evidencia de sus beneficios y de su perfil de seguridad, y con el respaldo de una compañía líder en nutrición especializada como Nutricia Bagó, acaba de lanzarse Fortifit PRO, que contiene 25 g de proteínas de alta calidad y una combinación de nutrientes funcionales que colaboran en el fortalecimiento general y el desarrollo muscular del cuerpo. La carga proteica nutre los músculos, contribuye con la recuperación, la prevención del desgaste y la aparición de lesiones. 

Su aporte de colágeno ayuda con el fortalecimiento de los tendones y articulaciones. La vitamina D colabora con la mineralización y fortalecimiento óseo, refuerza el sistema inmune y estimula la absorción de proteínas en el músculo, potenciando su desarrollo. Una porción de Fortifit aporta el 50% de la recomendación diaria de calcio, con una fórmula 0% en grasas, baja en azúcares y libre de gluten. 

“Sumar colágeno, calcio y vitamina D a un suplemento de proteínas potencia el efecto de sus componentes, contribuyendo a mejorar la función muscular y osteoarticular”, agregó la Lic. Martinelli. En la misma línea, Fernanda Garat, Licenciada en Nutrición, especializada en Deporte y Actividad Física, consideró que “la inclusión de estas sustancias puede contribuir a lograr ingestas suficientes y en función de ello lograr la sinergia que sucede en el cuerpo entre los distintos nutrientes”.

Acerca del relevamiento

Este se llevó adelante entre el 27 de octubre y el 13 de noviembre de 2020 por IPSOS a pedido de Nutricia Bagó y consistió en un cuestionario online de 20 minutos a 1004 participantes (50% hombres y 50% mujeres) residentes de AMBA que realizan actividad física al menos 2 veces a la semana (48% de nivel socioeconómico ABC1; 32%, C2 y 20%, C3).

Los encuestados, en líneas generales, mantuvieron su nivel de actividad física durante la cuarentena, con un promedio de 3,5 veces por semana, contra 3,7 antes de ésta. Primó la actividad aeróbica (running, caminata o bici, 47%), seguida por musculación, gimnasia con complementos, aparatos y pesas (30%), entrenamiento físico (modeladora, spinning, 25%), yoga, pilates, disciplinas físicas y mentales (24%), zumba y baile (12%).

Respecto de su estilo de vida, 1 de cada 2 refirió que la actividad física lo/a reconforta y hace que se sienta más saludable, al tiempo que afirmó que se esfuerza por incorporar alimentos y bebidas saludables, controlando la ingesta de calorías y proteínas, pero sin sacrificar pequeños placeres.

Sobre el consumidor de suplementos proteicos

Entre los encuestados, se identificó que consumen estos suplementos entre 3 y 4 de cada 10 de quienes realizan ejercicio al menos 2 veces por semana, cifra que asciende al 44% entre quienes se mueven al menos 4 veces a la semana. El 63% de los consumidores eran hombres, mayoritariamente de entre 25 y 40 años (77%), casi 6 de cada 10 (57%) son de nivel socioeconómico ABC1 y el 71% es omnívoro.

Quienes consumen o consumieron estos suplementos buscaban mejorar su rendimiento, incrementar su energía y ganar masa muscular; en más de la mitad de los casos, comenzaron a hacerlo por recomendación: el médico o nutricionista (55%) es el principal recomendador y la fuente de información considerada más confiable. Detrás, lo siguen el entrenador (45%), familiares, amigos o colegas (29%) e influencers (6%).

¿Por qué suplementar?

“La cantidad total de proteínas que necesitamos en un día varía de persona a persona, dependiendo de la edad, sexo, tamaño corporal, estado de salud, actividad física y ejercicio”, sostuvo la Lic. Garat.

Quienes realizan ejercicio dos, tres o cuatro veces por semana pueden tener necesidades nutricionales diferentes dependiendo de la intensidad y duración del ejercicio, la disciplina deportiva, el momento de la temporada, la edad, la forma física y el ambiente externo. La ingesta recomendada para mantener la masa muscular, con un equilibrio proteico positivo, puede estar entre 1,2 y 2,2 g de proteínas por kilo de peso corporal al día, frente a los 0,8-1 g que precisan las personas que no hacen deporte.

Ciertamente, una dieta variada y regular podría potencialmente suministrar las proteínas necesarias, pero los suplementos proteicos son una forma práctica de asegurar una ingesta de calidad y en la cantidad adecuada, tanto para mantener un buen estado de salud como para mejorar y maximizar su rendimiento deportivo.

Los suplementos de proteínas son muy utilizados por los deportistas, ya que activan las vías para incrementar la masa muscular, ayudando a aumentar la fuerza y la potencia musculares, además de reparar el daño muscular producido por el ejercicio. En determinadas circunstancias, también pueden ser importantes como fuente energética y beneficiar al sistema inmunológico

De todos modos, tal como aclaró la Lic. Martinelli, para obtener los mejores beneficios del uso de suplementos dietarios, “éstos deben formar parte de un estilo de vida saludable y ser consumidos en el contexto de una alimentación balanceada, porque no reemplazan una buena alimentación, sino que son buenos aliados para optimizar la salud y cubrir los requerimientos de quienes que por estilo de vida o elevadas demandas no logran alcanzar las recomendaciones”.

Aunque la actividad física sea recreativa, para potenciar el bienestar hay que propiciar que la alimentación sea completa, suficiente, variada, segura, posible y específica. Comer bien no se aprende de un día para el otro y, en ese sentido, el seguimiento profesional puede ser de gran ayuda para personalizar un entorno saludable que incluya ejercicio y alimentación, pero también una adecuada hidratación y un buen descanso”, concluyó la Lic. Garat.