En el Mapa Nacional de la Discriminación del INADI de 2013 había revelado que las personas que experimentaban discriminación por obesidad y/o sobrepeso se encontraban entre los cuatro primeros grupos discriminados,

después de los que experimentaron discriminación por situación socioeconómica, por color de piel y por el país de origen.

Para el 2022, en Argentina la discriminación y violencia que experimentan las personas en base a la imposición histórica y social de un modelo hegemónico de “normalidad”, aparece en tercer lugar. En este punto, se duplicaron las respuestas de las experiencias de discriminación relativas a las cuestiones estéticas y a las corporalidades gordas.

La discriminación se entiende como el trato desigual hacia otra persona o colectividad por diferentes motivos, entre ellos, las diferencias físicas. La gordofobia discrimina a las corporalidades que se diferencian del estereotipo de cuerpo hegemónico impuesto en la sociedad.

La gordofobia hacia los cuerpos no hegemónicos o aquellos que no encajan en los estándares de peso y talla se expresa a través de la estigmatización y la violencia a diario.

Los “cuerpos que no entran en la norma” –particularmente, los cuerpos gordos– son objeto de discriminación, burlas, exclusión, violencia y vulneración de derechos.

La gordofobia describe todas aquellas prácticas, discursos y acciones que burlan, marginan, estereotipan, prejuzgan, rechazan e implican la obstaculización o vulneración de los derechos de las personas bajo el pretexto de la gordura.

“A veces mencionada como sobrepeso u obesidad, la gordura es motivo de un estigma social que atraviesa de modo determinante y transversal a todos los segmentos etarios y socioeconómicos de la población, y afecta en mayor medida a las mujeres, personas LGBTIQ+, afrodescendientes, indígenas, migrantes y demás personas racializadas”, explican Lucia Mancuso, Betania Longhi, María Gabriela Pérez, analistas y asesoras del INADI.

Los ámbitos en los que más se discrimina a las personas por cuestiones estéticas, según el Mapa de discriminación del INADI, son en el ámbito educativo y en ámbitos de esparcimiento nocturno como boliches o bares.

En el último informe del INADI, las personas consultadas hicieron principal hincapié en la forma de combatir la discriminación desde el ámbito familiar, la importancia del rol del Estado y las escuelas.